El nivel de contaminación del aire alcanzó niveles tan altos en el norte de Italia, que la alcaldía de Turín pidió a la población que mantenga las ventanas cerradas y evite estar al aire libre así como hacer deportes.
La falta de lluvias y las altas temperaturas en las regiones más industrializadas de la península, junto con los datos sobre la concentración de partículas finas en el ambiente, --cerca de 114 microgramos por metro cúbico, más del doble del valor máximo fijado de 50 microgramos--, generaron alarma entre las autoridades.
Desde el comienzo del año, el umbral de 50 microgramos ha sido superado 69 días, mientras que el límite "admisible" es de 35 días.
Teniendo en cuenta esta situación tan "crítica", el responsable de Medio Ambiente local, Alberto Unia, instó a "los ancianos, niños y personas con enfermedades cardiorrespiratorias" a "mantenerse en lo posible en lugares cerrados y evitar abrir las puertas y ventanas".
Se desaconseja también realizar "actividades físicas intensas y prolongadas al aire libre", y se insta a los que tienen que viajar a pie o en bicicleta a "hacer trayectos lo más corto posible y lejos de calles con mucho tráfico".
La ciudad también ha limitado el tráfico de los vehículos diesel, los más contaminantes.
Medidas similares fueron tomadas en otras ciudades, como Milán, donde la concentración de partículas finas llegó el jueves a los 90 microgramos por metro cúbico.
El alcalde de la capital lombarda, Giuseppe Sala, considera que "para combatir la contaminación es necesario tomar medidas estructurales a nivel europeo".
Se trata de una situación inusual y favorecida por la ausencia de lluvias.
En Twitter, el astronauta italiano Paolo Nespoli envió el miércoles una imagen en la que se puede ver una gran nube negra sobre el norte de Italia.
The Po Valley in #Italy a few hours ago... fog or smog? #VITAmission pic.twitter.com/Sh2UFfSlB3
— Paolo Nespoli (@astro_paolo) 18 de octubre de 2017
"En la llanura del Po se ve neblina o niebla con humo", escribió.
El ministro italiano de Medio Ambiente, Luca Galletti, sostiene que el tema es "muy complejo" y que afecta a grandes ciudades y capitales de todo el mundo.